Espléndido encuentro fraterno lo que acabamos de vivir en San Agustín, Valencia.

Con la magnífica reflexión de D. Javier Llopis, entramos en la semana santa más concientes de que vamos a celebrar el acontecimiento más importante de nuestra fe de forma única. De hecho no celebramos un recuerdo o una fecha, sino la salvación misma que Dios nos otorgó a través de la muerte y resurección de su Hijo Jesús, que nos adelantó en la última cena consagrando el pan y el vino como su cuerpo y sangre. Pero además, en el gesto del lavatorio de los pies, nos dejó un ejemplo tan elocuente para que no quedara duda alguna de que la forma de vivir nuestra existencia es la del servicio a los demás.

Y, como muchas veces las cosas de Dios son tan paradójcas, en la lógica del don descubrimos quiénes somos de verdad y para qué hemos sido llamados, respondiendo así a la llamada a la santidad.

¡Ojo! La santidad es un don que Dios nos ofrece ya en el Bautismo, o sea, no tenemos que lograr nada, pero sí que debemos desarrollarla para que se manifieste. Allí está el plan de Dios que cada uno está llamado a descubrir.

¿Cómo se descubre? Ya lo sabrás. ¿Cómo sabes si estás enamorado? Ya lo sabes.

Pues, amigo que lees, enamorate más de Cristo y sabrás lo que Él te ofrece.  Conócelo, ámalo y déjate sorprender por Él. 

Ofrecemos finalmente el video del taller de baile. El taller de la evangelización estará disponible más adelante.

Feliz Semana Santa y Pascua de Resurección a todos.