Un fin de semana muy rico lo que acabamos de vivir en Benicássim donde hemos estado compartiendo distintos tiempos de crecimiento humano y espiritual en la Parroquia Sto. Tomás de Villanueva.

Todo empezó el viernes por la noche con una vigilia de oración abierta a todos, especialmente a las familias de los niños de primera comunión y confirmación con los que habíamos quedado para este fin de semana. La oración siempre nos carga las pilas y abre nuestro corazón a recibir el amor y la gracias de Dios.

Un sábado particularmente movido lo que pudimos vivir en el Colegio Mater Dei con los niños de primera comunión y con sus padres empezando un viaje para descubrir a la persona más amada por Dios por ser única, irripetible y original. ¡Que caras de sorpresa y maravilla al descubrir que lo somos cada uno de nosotros!

También el domingo ha sido precioso con los chavales de confirmación: la palabra de Jeremías 29,11 les ha guíado a reflexionar sobre el plan de esperanza que Dios tiene para cada uno de ellos y sobre la posibilidad de abrirse a la acción del Espíritu Santo para realizarlo ponendo nuestras ilusiones, sueños y proyectos en sus manos.

Todo eso que hemos vivido, no hubiera sido posible sin la invitación del párroco, nuestro muy querido D. Luis Oliver, sin el apoyo humilde y generoso de D. Javier, y sin la preciosa colaboración de las catequistas. Gracias a todos, sois un regalo de Dios.

¡Hasta pronto, sDq!